La Psicoaromaterapia, como los Cuentos de Hadas
13/11/2024

La madre de Goethe era conocida por su talento como cuentacuentos. Los contaba con infinita sensibilidad, prestando atención al lenguaje corporal de sus oyentes y adaptando la historia a lo que iba percibiendo de ellos.

Cuando trabajamos con aceites esenciales en el área de lo psicoemocional, debemos saber que lo que tenemos ante nosotros es un ser humano con un contexto y una historia únicos, y que la herramienta que ofrecemos y presentamos en el vínculo no es inocua y sí muy compleja.

En Psicoaromaterapia, como con muchas otras cosas, dos más dos rara vez son cuatro. El mismo aceite esencial, a pesar de su composición química demostrada como tendente a sedar el sistema nervioso, puede generar eso mismo en una persona, y en otra generar una cascada ingente de cortisol y adrenalina, debido al impacto concreto y único que su aroma tiene sobre la amígdala, a pesar de que, insisto, los estudios sugieran que lo que va a suceder es lo primero, y no lo segundo.

El psicoaromaterapeuta debe conocer la teoría clínica del aceite esencial, y luego olvidarla.

Porque una cosa es lo que pone en el libro y otra muy distinta lo que le sucede y te está contando la persona que ha decidido que le acompañes.

La Psicoaromaterapia es un arte que tiene en cuenta múltiples factores.
Se puede enseñar de muchas formas diferentes, pero en todas debería haber bases sólidas sobre cómo acompañar y cómo abordar los infinitos y complejos estados en los que se puede encontrar el otro, el propio terapeuta y la entidad única compuesta por ambas partes.

Poca broma.

Con respecto a la herramienta en sí, te dejo un extracto del libro de Bruno Bettelheim, “Psicoanálisis de los cuentos de hadas”, en el que describe las bondades de éstos.
Es la misma forma en la que yo siento, acompaño y comparto mi saber sobre aceites esenciales…

《Un cuento de hadas es, ante todo, una obra de arte; (…) cualquier intento deliberado de ofrecer algo concreto a una persona en particular no puede ser nunca el objetivo de una obra de arte.

El escuchar un cuento de hadas y tomar las imágenes que éste nos presenta puede compararse con arrojar unas cuantas semillas, de las que sólo unas pocas darán fruto en la mente infantil.

Algunas de estas semillas trabajarán en la parte consciente de la mente, mientras que otras estimularán algunos procesos inconscientes.

Habrá otras, en cambio, que necesitarán permanecer en reposo durante algún tiempo, hasta que la mente del niño alcance el nivel adecuado para que germinen, y habrá algunas, por último, que nunca echarán raíces.

Sin embargo, las semillas que se han esparcido en el terreno adecuado darán lugar a hermosas flores y a sólidos árboles -es decir, darán validez a importantes sentimientos, provocarán percepciones internas, alimentarán esperanzas y acompañarán ansiedades- y, al hacerlo, enriquecerán la vida del niño en un momento determinado y para siempre. 》

Veinticinco años llevo ya trabajando con lo que resulta de una destilación, y todavía me inspira y me llena el alma la magia que sucede en la mirada del otro cuando huele un campo de rosas o un pinar en una pequeña tira de papel.

Las historias que emergen de la memoria que se abre…
Uf! No tiene precio.
Y estas historias no se pueden tratar de cualquier manera. Hay que honrarlas, porque son sagradas.
Es la Vida misma en un traje único y genuino, en una forma narrativa que no se volverá a repetir jamás.

Cada aceite esencial tiene su mito, y se asoma a distintos cuentos de hadas.
Deja ahí su semilla, anclándose al arquetipo más afín y, como decía Bettelheim, dará lugar a hermosas flores y a sólidos árboles.

En febrero da comienzo la segunda promoción del primer nivel de “Psicoaromaterapia Sensible a Trauma”.

Si deseas aprender desde lo mitológico, lo simbólico, la metáfora y los cuentos, de una forma amena, segura, completa y teniendo en cuenta el trauma, aquí tienes un espacio para ti.

Un viaje fantástico.

Que lo disfrutes.
Con todo el cariño,
Sabela.